Como recordaréis, el otro día se me ocurrió comprar por 1 euro el primer fascículo de un coleccionable de RBA sobre minerales, en el que regalaban oro auténtico, con el objetivo de venderlo en una casa de empeño y ver si conseguía ganar dinero.
Aquí está la botella de oro:
Y aquí está la descripción del contenido de la misma:
Dado que el oro estaba conservado en alcohol, coloqué un papel absorbente debajo:
El tapón no ofreció resistencia:
Derramé todo el contenido, quedando unas pequeñas escamas de oro esparcidas:
Cogí una de ellas con una pinza. Fue extremadamente complicado:
Las escamas de oro eran muy delicadas:
Pero ¡horror! Cada vez que intentaba coger una escama, comenzaban a volatilizarse:
¡Eran tan frágiles que el proceso fue imparable!:
En poco tiempo, me quedé sin oro:
Como veis, este experimento ha sido un fracaso. Los de la editorial RBA lo tenían todo muy pensado. Ni siquiera pude llegar a la casa de empeño con una cantidad decente de oro, ya que se volatilizó. Ignoro cuál sería su valor en el mercado, pero ahora tendré que buscar otra manera de hacerme rico.
jueves, 11 de febrero de 2010
Compro oro, vendo oro (2/2)
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5 comentarios:
Efímero momento, le pasó como a la economía española, se disipó. No todo lo que brilla es oro... ¿igual era mercurio?
(entuper)je,je,jee..
La economía española no está muerta. Sólo está de parranda.
OLI I7O
Yo te puedo decir cómo ganar tu primer millón de euros, pero antes deberás pagarme un euro por las 999.999 formas de no conseguirlo ... :-)
Javier García.
Oye, qué entrada tan buena, este es uno de esos experimentos que me gustan a mí. No sabía que en tan pequeñas cantidades era volátil. Pero es que claro, a un euro ¡debía ser difícil pesarlo hasta con la balanza de mi laboratorio!
jaja no debiste hacerlo sobre la tela. yo lo habria dejado evaporar y a probar a venderlo jeje
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