El misterioso planeta Oli ha despertado el interés de toda la comunidad científica. Y sí, parece ser que hay vida, pero aún está por descubrir si esa vida es inteligente. Por lo pronto, se han encontrado varios habitantes que muestran, a su manera, cómo es ese planeta.
Si alguien desea comunicarse con el planeta Oli, puede enviar una sonda a:
mail@planetaoli.com
(Pincha sobre ellos)
EL ASTRÓNOMO:
De tanto que se ha dedicado a estudiar el planeta Oli, ha pasado a modificarlo él mismo y, por tanto, convertirse en un habitante más.
STABOLI:
No puede hablar. Cada vez que escucha o lee una frase siente el impulso de dibujarla, por disparatada que sea. Es su forma de comunicarse.
OLIPÉCICO:
De tantas vueltas que le da a las cosas, ha perdido todo el pelo. Pero, además de plantearse ciertas cuestiones, también trata de hallar sus respuestas.
FOLINI:
Hay quien califica su obra como "arte y ensayo", pero casi todo el mundo la llama "ensayo", a secas.
CARACOLI:
Es un cruce entre el ADN de un caracol y el que quedó de Caceroli tras su muerte. Tiene la personalidad de éste, pero con más taras aún.
FIOLINDA:
Es la flor parlanchina, surgida como resultado de plantar una víscera de Olipécico. Sabe hacerse oír.
CACEROLI (fallecido): Era imprevisible. Cuando se le iba la olla, no era en sentido figurado. Nunca hay que hacer caso de lo que decía.
MONOLITO (ido):
Viajó por numerosos planetas, y conocía mucha información del exterior. Que supiera transmitirla era otra historia.
2 comentarios:
No hay que cantar rap para saberlo, soy mi peor enemigo pero prometo que en la próxima vida me cuidaré más.
Doy fe. A mi a enemiga de mi misma, no me gana nadie!
Publicar un comentario