1. Lame los culos adecuados. Es difícil de distinguir, pero si te fijas, verás un culo que reluce por encima del resto. Ve a por él a saco.
2. Marea la perdiz. Llama a tu jefe cada dos por tres para comentarle chorradas. Conseguirás que se convenza de que trabajas duro.
3. En las reuniones, defiende a ultranza lo obvio. No importa que el argumento sea compartido por todos; parecerá que tienes criterio y te labrarás un respeto entre el resto.
4. Haz de la frivolidad el centro de tus conversaciones. Destaca lo malos que son los lunes, lo buenos que son los puentes, o la temperatura de la oficina.
5. Quéjate siempre. No hables de encargos, sino de marrones. Es importante que vean que estás saturado de trabajo.
6. Si no te apetece (o no sabes) hacer algo, proclama a los cuatro vientos que hoy tendrás que quedarte más tiempo para resolver ese tremendo marrón.
7. Finalmente, practica la soberbia. Por ejemplo, si te cruzas con la limpiadora en plena labor, pisa sin piedad por donde esté fregando.
martes, 12 de mayo de 2009
Cómo triunfar en el trabajo
(Basado en hechos reales)
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3 comentarios:
jhejoejoejoe... grande, grande
Ay, sería incapaz, sobre todo de pisar por lo recién fregado... rarita que es una.
Gran entrada, el punto 1 quizás algo facilón pero el resto estupendo.
Alguien necesita unas vacaciones.
Pe
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