viernes, 2 de enero de 2009

Año sístole

Como una diástole existencial, durante 2008 mi vida se llenó de sangre y ahora, en 2009, toca sístole. Bum-Bum y la sangre vuelve a regar hasta el último capilar allí donde se necesita vida, ni más ni menos.


De momento, el año va a comenzar con el viaje que el Astrónomo, Staboli, Monolito, Caracoli y yo vamos a hacer al volcán Olignífugo, en la cara oculta del planeta Oli.

He de confesar que tengo miedo de lo que podamos encontrar allí.

1 comentario:

Seli dijo...

sístole auricular, diástole ventricular. 2009 será un gran año, no temas al volcán!

¡Genial Martes y Trece siempre, hay que empezar el año con buen humor!